El Ayuntamiento de Archena ha anunciado que el pregón de las Fiestas Patronales de este año correrá a cargo de la familia Enrique Rech, referente nacional en la elaboración de dulces artesanos desde 1850 y símbolo de tradición, calidad y excelencia gourmet.
Con más de 170 años de historia, Enrique Rech no solo representa una marca reconocida por sus turrones y regalos gourmet, sino una auténtica saga familiar que ha mantenido viva la esencia de la artesanía al más alto nivel. Desde sus orígenes en un pequeño obrador de Jijona, seis generaciones han perpetuado el legado que ha llegado incluso a los paladares más exquisitos, como los de la Casa Real.
"Nos sentimos profundamente honrados de anunciar que será la familia Enrique Rech quien dé inicio a nuestras queridas fiestas. Son un ejemplo de cómo la dedicación, el esfuerzo familiar y el respeto por la tradición pueden perdurar y brillar con luz propia a lo largo de generaciones", ha declarado la alcaldesa de Archena, Patricia Fernández, quien añadió que "los productos Enrique Rech han estado presentes en los momentos más especiales de muchas familias de Archena. Que el próximo 31 de mayo puedan compartir su historia con nosotros y dar el pistoletazo de salida a nuestras fiestas es un verdadero regalo".
La elección de esta ilustre familia no solo rinde homenaje a su legado, sino también a los valores que comparten con los archeneros, el cuidado por los detalles, el valor de la tradición y la pasión por crear momentos memorables. El pregón dará la bienvenida oficial a una de las celebraciones más esperadas del año.
Una historia de sabor que empezó en Archena
La vinculación de Enrique Rech con Archena se remonta al año 1961, cuando los matrimonios fundadores —Enrique Rech y Mari Rojas, y Fernando Picó y Maruchi Rech— iniciaron su aventura heladera en la Calle Rías. Empezaron en dos pequeños quioscos conocidos por todos los vecinos: el "quiosco de las monjas" y el "quiosco de Mariano".
Poco después, ampliaron su actividad al adquirir un local en la Avenida del Carril, donde desarrollaron su labor durante décadas. Enrique Rech, con gran esfuerzo y visión empresarial, comenzó también la distribución al por mayor usando una simple motocicleta con caja refrigerada, que lo llevó incluso a convertirse en proveedor del emblemático Balneario de Archena.
La heladería Enrique Rech ha estado siempre ligada a las Fiestas Patronales del Corpus Christi y la Virgen de la Salud, no solo como parte del paisaje festivo de las calles del municipio, sino como una tradición en sí misma: helados y granizados compartidos entre vecinos durante los desfiles de Moros y Cristianos, la solemne procesión de la Virgen o la colorida clausura con las carrozas.