La Benemérita ha desmantelado un invernadero con 141 plantas de marihuana en última fase de cultivo y ha aprehendido más de 20 kilos de cogollos de esta sustancia
En el registro domiciliario se ha incautado la droga, todos los útiles empleados para su cultivo y manipulación, y varias armas
La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco de servicio establecidos para prevenir y perseguir el tráfico de drogas, ha desarrollado en Archena la operación ‘Corpus’, que se ha saldado con la detención de dos personas y la desarticulación de un activo punto de cultivo y manipulación de cannabis.
En la operación, los efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita se han incautado de 141 plantas de marihuana y 22 kilogramos de cogollos dispuestos para su inminente distribución, todos los efectos relacionados con la actividad ilícita ahora esclarecida y varias armas.
Las actuaciones se iniciaron hace unos meses, cuando la Guardia Civil retomó una investigación abierta con anterioridad por un supuesto cultivo de marihuana en una vivienda de Archena, ubicada muy próxima a un centro educativo a un parque infantil, unos hechos que habían generado cierta alarma social entre los vecinos.
Los guardias civiles establecieron entonces un discreto dispositivo de vigilancia sobre el inmueble donde se presumía que podría tener instalado un invernadero destinado al cultivo ilícito de marihuana tipo indoor.
Fruto del dispositivo, los guardias civiles identificaron a los dos moradores de la vivienda, un hombre y una mujer que eran pareja, que presuntamente se encontraban tras la actividad delictiva investigada.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, la Guardia Civil diseñó la fase de explotación de la operación, que estaba compuesta por varias decenas de efectivos por tierra y aire debido a los antecedentes violentos de uno de los sospechosos.
En la entrada y el registro realizado en el domicilio investigado, los guardias civiles hallaron un invernadero instalado en varias estancias del inmueble, con capacidad para el cultivo de aproximadamente un millar de plantas al año, que en ese instante tenía en última fase de cultivo 141 plantas.
En otra habitación, utilizada lugar de secadero y manipulación de la droga, se hallaron 22 kilogramos de cogollos dispuestos para su inminente distribución.
Junto con toda la droga, la Guardia Civil se incautó de todos los elementos que componían el invernadero clandestino y el secadero, como dispositivos de iluminación, calefacción, riego y ventilación; y tres armas de fuego –una escopeta con el número de serie borrado y con munición y dos carabinas de aire comprimido– y dos armas blancas de grandes dimensiones, tipo machete.
El registro culminó con la detención de los dos sospechosos como presuntos autores de los delitos de cultivo o elaboración de drogas, defraudación de fluido eléctrico –por una conexión ilícita a la red eléctrica–y tenencia ilícita de armas.
Los detenidos, la droga aprehendida, los efectos incautados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición de la autoridad judicial competente.