Un grupo de operarios municipales limpian y dejan a punto, desde ayer y hasta los próximos días, los más de 20 imbornales y rejillas de recogidas de aguas pluviales existentes en el casco urbano de Archena, de cara a estos días de septiembre y octubre, meses propicios de lluvias en esta zona. Se trata de evitar que las aguas queden obstruidas debido a la hierba, broza, tierra y plantas existentes en estos conductos.
El jefe municipal del equipo de estos trabajadores ha comentado que en breves días quedarán completamente vaciados y limpios los citados imbornales para que en caso de lluvias el agua circule con fluidez y no provoque inundaciones y desbordamientos.