Los empresarios de este municipio turístico consideran la decisión adoptada, que coloca a Archena en fase 3 como ‘ataque directo’ que vuelve a poner en riesgo sus negocios y cientos de puestos de trabajo en plena temporada de verano
Los representantes de los distintos sectores no encuentran una justificación a las medidas adoptadas por el Ejecutivo autonómico ante el bajo índice de incidencia en el municipio y se rebelan contra esta decisión
El sector de la hostelería, el comercio y el turismo de Archena han mostrado públicamente su disconformidad con el Gobierno Regional ante las nuevas restricciones Covid aprobadas por el ejecutivo y han lanzado una campaña en Redes Sociales, ‘SOS a la Hostelería, Comercio y Turismo de Archena’ en señal de protesta. Los representantes de estos sectores pretenden buscar apoyos y movilizar al conjunto de la población ante esta decisión que perjudica directamente el funcionamiento normal de sus negocios.
Asimismo consideran la decisión adoptada, que coloca a Archena en fase 3 como ‘ataque directo’ que vuelve a poner en riesgo sus negocios y cientos de puestos de trabajo en plena temporada de verano.
Los empresarios consideran que se ha pasado “de forma injusta’, del nivel 1 al nivel 3 (nivel de alerta alto) con una incidencia de 82,4 por cada 100.000 habitantes.. Han justificado sus palabras comparando sus datos con otros 17 municipios con mayor índice de incidencia por lo que han insistido que “solo hayan castigado a Archena”. “Esto no atiende a ningún criterio sanitario o epidemiológico razonable o lógico”, han insistido para exigir una explicación” justa y comprensible” y una rectificación por parte del Ejecutivo autonómico”.
La catalogación de nivel 3 supone la reducción del aforo en locales comerciales y hosteleros al 30% y diferentes limitaciones en la organización de eventos culturales, turísticos y de ocio, por lo que los empresarios han afirmado no entender esta decisión “sin base ni criterio racional”. “Ponen en riesgo nuestros negocios y cientos de puestos de trabajo en plena temporada de verano por una decisión política sin justificación. Somos un municipio turístico y vivimos de nuestros clientes”, han concluido los representantes de los distintos colectivos.