La Consejería de Turismo y Cultura ha restaurado las tallas de la Virgen de los Dolores de Juan González Moreno y el Cristo del Monte Calvario (Cristo Crucificado / Yacente) de Enrique Salas. Las imágenes, pertenecientes a la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista de Archena, han sido hoy entregadas por la consejera de Turismo y Cultura, Miriam Guardiola, en el Centro de Restauración de la Región.
Guardiola destacó "el intenso trabajo realizado cada año desde el Centro de Restauración de cara a la Semana Santa para que las tallas protagonistas de los diferentes desfiles procesionales de la Región, muestra de una gran tradición escultórica, luzcan en las mejores condiciones". En esta ocasión, añadió, "se trata de dos hermosas imágenes que, en tan solo unos días, recorrerán las calles de Archena con motivo de su Semana Santa, declarada de Interés Turístico Regional".
Virgen de los Dolores
En el caso de la Virgen de los Dolores, se trata, según explicó la titular de Cultura, "de una escultura 'de vestir' realizada en la segunda mitad del siglo XX por uno de los grandes escultores de la Región, Juan González Moreno, una obra de inspiración salzillesca y notable factura y calidad técnica que destaca por la expresividad de las manos y el rostro".
El proceso de restauración llevado a cabo ha sido complicado, ya que la talla había sido sometida a una desafortunada intervención anterior que dañó la policromía original de forma irreversible. "Un nuevo ejemplo de la importancia de contar con profesionales como los del centro regional para realizar trabajos de restauración que realmente ayuden a conservar el patrimonio artístico y religioso en las mejores condiciones", indicó la consejera.
A la alteración cromática se sumaban otros deterioros, como el levantamiento de estratos de la base del enlienzado, la fijación inadecuada de los brazos, así como múltiples arañazos en manos y cuello derivados del proceso de vestimenta de la imagen.
La restauración se ha centrado en la retirada de repintes, seguido de una reconstrucción de estratos y de una reintegración cromática diferenciada de cada una de las faltas y abrasiones que presentaba la película pictórica original. Se ha finalizado con el correspondiente barnizado de protección, ajustando el brillo a la policromía semimate que dejaba en sus obras Juan González Moreno.
Cristo Monte Calvario
El Cristo, conocido como Cristo Monte Calvario, fue realizado en la primera mitad del siglo XX por el relevante creador archenero Enrique Salas para su función específica como Crucificado y Yacente, y que "es protagonista de uno de los momentos más populares y emocionantes de la Semana Santa de Archena, el descendimiento que tiene lugar cada Viernes Santo". En este sentido, apuntó Guardiola, "estamos ante una singular obra, uno de los pocos ejemplos que aún quedan de Cristo articulado para proceder al desenclavamiento".
También en este caso, la imagen presentaba un notable cambio derivado de una desafortunada intervención anterior que alteró su policromía original, cambiando el color cetrino primitivo por marrón oscuro, ocultando y alterando gotas de sangre. Un importante daño al que se sumaban pequeñas grietas y fisuras, abrasiones de la película pictórica y desprendimientos puntuales de estratos.
"Afortunadamente, y tras un intenso y complicado proceso de limpieza, se ha conseguido eliminar el estrato más reciente y recuperarse los colores originales, tras lo que se observa un asombroso cambio cromático en la obra; un proceso que, de nuevo, pone de manifiesto la experiencia y formación de los técnicos del Centro de Restauración", afirmó Guardiola.
La intervención se completó con un elaborado proceso de reintegración cromática diferenciada de las zonas que presentaban faltas o abrasiones, y que en las zonas de piernas y pies ha sido muy elevada (un desgaste que es signo evidente de la gran devoción que esta imagen ha despertado a lo largo de la historia), finalizando con el correspondiente barnizado de protección.